Muchos creen que las civilizaciones antiguas han dejado
restos de tecnología avanzada a lo largo de los siglos, mucho antes de que el
hombre tuviera conocimiento.
"VIMANA": Es el nombre de una antigua máquina
utilizada por los dioses de la india. Los relatos más antiguos sobre esta
sorprendente civilización, escritos en sánscrito hacen miles de años, describen
las diferentes formas y materiales de los "Vimana". Estas extrañas
máquinas voladoras fueron utilizadas en increíbles combates, dignos de la
Guerra de las Galaxias, cientos de años antes de Cristo.
En el Mahabharata, relato que describe la guerra entre los
dos clanes más importantes de la India hacia el año 3,000 a.C., los Vimanas
voladores se mencionan cuarenta y un veces junto a sofisticadas armas de
combate que disparan rayos de luz. Por ejemplo, se hace referencia a los
ataques del rey Salva contra la ciudad donde residía el dios Krishna en
Dwaraka. En esta épica disputa, Salva conduce un Vimana volador llamado Saubha
que tiene el poder de hacerse invisible. Krishna lo devuelve el ataque con un
rayo que ubica y destruye a sus enemigos a través del sonido.
Veamos otra ilustrativo pasaje del Mahabharata que cuenta el
ataque de Gurkha a la tribu de los Vrishis.
“Gurkha viajando en su poderoso y rápido Vimana lanzó un
sólo proyectil, cargado con todo el poder del Universo, contra las tres
ciudades de los Vrishis y los Andhakas. Una incandescente columna de humo y
fuego, tan brillante como diez mil soles, se alzó en todo su esplendor. Era el
arma desconocida, el Rayo de Acero, un gigantesco mensajero de muerte que
redujo a cenizas la raza de los Vrishnis y los Andhakas.”
En el Ramayana, que narra las aventuras de la princesa Sita
secuestrada por el malvado Ravana, se menciona a otra máquina voladora llamada
Puspaka.
“El carro Puspaka que se parece al Sol, fue traído por mi
hermano Ravana. Este excelente carro aéreo puede ir donde quiera a
voluntad……parece una nube luminosa en el cielo…..y el rey Rama lo tuvo y se
elevó con el hacia la más alta atmósfera”.
Si bien el texto no califica a este carro volador como un
Vimana, bien podría ser otra máquina voladora que usaba los mismos principios
de los famosos Vimana.
Ilustración de lo que podría haber sido el Puspaka de Ravana
Según el Doctor V. Raghavan, ex profesor de sánscrito de la
Universidad de Madrás, existen muchos documentos en sánscrito, datados de hace
cientos de años, que prueban que visitantes extraterrestres estuvieron en la
antigua India.
“Hay una enorme cantidad de fascinante información sobre
máquinas voladoras e incluso sobre armas de ciencia ficción, que puede ser
encontrada en las traducciones de los Vedas y otros antiguos textos en
sánscrito. Cincuenta años de investigación me han convencido que hay seres
vivientes en otros planetas y que estos visitaron la Tierra 4,000 años a.C.”
No sólo existen relatos sobre las cualidades aerodinámicas
de estos Vimana sino también sobre la manera como pueden ser construidos. En el
Ramayana se indica que se necesitan 16 tipos de metales para construirlos pero
aquí en la Tierra solo conocemos tres de ellos.
El Doctor Ruth Reyna de la Universidad de Chandrigarh
tradujo unos textos del sánscrito donde se describe la fuerza
“anti-gravitacional” que es aquella que los Yoguis desarrollan para levitar.
Según sus investigaciones, esa misma fuerza anti-gravitacional es la que
permitía a los Vimana desplazarse por el espacio.
Aunque parezca paradoxal comparado con la mayoría de
reportes de avistamientos de naves extraterrestres, la información contenida en
los textos sánscritos sobre la forma, el proceso de construcción, los
materiales y las armas de los Vimana deja poco a la imaginación. Las numerosas
menciones de Vimanas en textos que tratan no sólo de la mitología hindú sino
también de su historia, indican que estos Vimana fueron una posible realidad
cientos de años antes de Cristo.
El Doctor Raghavan afirma que esta tecnología fue traída por
seres de otros planetas 4,000 años a.C., en la misma época en que la cultura
sumeria florecía en Mesopotamia y los extraterrestres Anunnaki vivían entre
ellos.
Según el Dr. Raghavan, las leyes de los babilonios
(Hakhata), sucesores de los sumerios en la región de Mesopotamia, indican sin
ambigüedad.
“El privilegio de comandar una de estas máquinas voladoras
es muy grande. El conocimiento del pilotaje está entre nuestras más antiguas
herencias. Fue un regalo de ‘aquellos que vinieron de arriba’. Lo recibimos de
ellos como un medio para salvar muchas vidas.”
“Aquellos que vinieron de arriba” es, en lenguaje sumerio,
sinónimo de Anunnaki. Podemos inferir que fueron los Anunnaki quienes mostraron
a los sumerios y luego a los babilonios, como construir y manejar estas
sofisticadas máquinas.
El conocimiento y la presencia Anunnaki se podrían haber
extendido hasta la India. La iconografía de algunos dioses hindúes y algunos
relatos mitológicos pueden ser evidencia de una posible presencia Anunnaki. Es
interesante analizar el caso de Hanuman, uno de los fieles servidores de Rama,
cuyo relato se encuentra en el Ramayana.
Hanuman era un hombre-mono inteligente que podía
comunicarse, tenía poderes, y que dirigió un ejército de monos contra la
guarida de Ravana en la actual Sri Lanka.
¿Hanuman podría ser fruto de otro experimento Anunnaki? No
hay que olvidar que en el relato de héroe sumerio Gilgamesh, este viaja
acompañado de Enkidu, un ser con características de Neandertal que podría ser
una especie de Hanuman.
¿Podemos afirmar que
los textos hindúes narran eventos que realmente sucedieron? o ¿son sólo relatos
mitológicos?
Hace unos años, una investigación realizada por Michael
Cremo confirmó que el supuesto puente entre la India y Sri Lanka, que según el
Ramayana fue construido por Hanuman y su ejército de monos, se encuentra
sumergido frente a las costas del sur de la India. Lo más probable es que se
trate de una formación natural y no de una construcción artificial hecha por
Hanuman, pero eso no descalifica la veracidad de las descripciones encontradas
en el relato.
De hecho, muchos de los personajes mencionados en estos
relatos han sido figuras históricas como el propio dios Krishna que se supone,
adoptó forma humana y participó en la gran batalla del Mahabharata. En la
actualidad se puede visitar la casa donde Krishna creció en Gokul. Se trata de
la morada de Nanda Maharaj, con sus 84 columnas, descrita detalladamente en los
textos sagrados hindúes. En la entrada de la casa se encuentra el árbol en el
que Krishna solía jugar y recostarse a tocar la flauta hace 5,000 años. Este
lugar tiene tanta relevancia que ha sido calificado como patrimonio de la
humanidad por el gobierno hindú.
Por otro lado, la gran confrontación en el llano de
Kurushetra entre los Pandavas y Kauravas, narrada en el Mahabharata, es parte
de la historia de la India. Es más, recientes investigaciones sostienen que
Dwaraka, la ciudad de los mil templos mencionada en este mismo relato, se
encuentra sumergida frente a las costas occidentales de la India. Cabe destacar que en el Mahabharata se
menciona más de cuarenta veces las fantásticas naves voladoras Vimana, y armas
letales que parecen salidas de una película de ciencia ficción.
En resumen, podemos afirmar que los hechos narrados en los
textos hindúes sucedieron, que los personajes existieron y que los lugares han
sido ubicados por la arqueología moderna. Hay pues, sobrados motivos para
sospechar que los Vimana existieron no en la imaginación de los que contaron el
relato, sino en la realidad misma. La precisión con la que los Vimana son
descritos es sorprendente.
“Fuerte y duradero debe ser el cuerpo del Vimana, como un
gran pájaro volador hecho de material ligero. Dentro uno debe poner el motor de
mercurio con su aparato calentador de acero debajo. A través del poder latente
en el mercurio, el cual pone el torbellino en movimiento, un hombre sentado en
su interior puede viajar una gran distancia en el cielo. Los movimientos de los
Vimana son tales que puedes ascender verticalmente, descender verticalmente, y
moverse inclinadamente hacia delante y hacia atrás.” (Extracto del
Samaraanganasutraadhaara.)
Los relatos sobre los Vimanas han sido compilados y tratados
en libros como “The Antigravity Handbook” de David Hatcher Childress. En este
trabajo se mencionan las técnicas para construir los Vimana empleando
materiales como barras de grafito, bobinas de cobre o indicadores de cristal.
Para muchos Ufólogos, los Vimana son lo que hoy conocemos
como platillos voladores y sus tripulantes son seres de otros planetas. Prueba
de ello son los cientos de textos, traducidos del sánscrito, donde se mencionan
estas máquinas voladoras. Los especialistas afirman que existen aún muchos
otros textos sobre los Vimana que no han sido traducidos todavía.
Michael Cremo, como Schliemann el descubridor de Troya,
asume la veracidad de los relatos mitológicos. Siguiendo las descripciones de
los textos antiguos hindúes, Cremo ha encontrado varios de los lugares
mencionados en estos relatos. Trabajos como el de Michael Cremo (“Arqueología
prohibida”) nos revelan una historia poco convencional de la evolución de la
especie humana. En ella, los elementos mitológicos y sagrados tienen un valor
histórico, algo que no admite la historia tradicional.
Steve Quayle, el escritor e investigador que afirmó que las
naves Vimanas existen
En 2011, Steve Quayle afirmó en el programo de radio Coast
to Coast AM, que una nave Vimana fue atrapada en una cueva de Afganistán,
causando la misteriosa desaparición de por lo menos 8 soldados estadounidenses.
Además algunos líderes mundiales habrían hecho varios viajes para ver el
descubrimiento.
“Hay una guerra en marcha, China, Rusia y los EE.UU., todo
el mundo está compitiendo por tener en su poder la antigua tecnología Vimana”,
dijo Quayle en el programa de radio.